El 4 de septiembre, faltando una semana para retirarse del país, Charles A. Washburn recibe un oficio del Gobierno Paraguayo, firmado –por primera vez- por el flamante Encargado del Ministerio de Relaciones Exteriores, el coronel Luis Caminos quien reemplazó al destituido Gumersindo Benítez, acusado de traición y posteriormente fusilado el día 22 de ese mismo mes.
El propio Washburn se refiere al oficio en estos términos:
Recibí una carta muy larga de Caminos, mucho más larga que cualquiera que haya recibido del desafortunado (ex ministro de Exteriores Gumercindo) Benítez. Constaba de cuarenta páginas de documentos oficiales. Esta carta evidentemente había sido preparada antes de la llegada del Wasp (arribó el 28 de agosto de 1868), y bien era la intención de López de tratarnos como lo había hecho con Carreras, Rodríguez y Pereira. Fue escrita en el mismo estilo y en fraseología similar a las firmadas por Benítez. Quien había escrito todas estas cartas era un tema de discusión frecuente con nosotros. Ellas mostraban una astucia jesuítica digna de López, pero demostraban un talento para escribir y una capacidad intelectual muy por encima de su poder mental y que atribuimos en su composición a los antiguos Vicepresidente Sánchez o Padre Maíz. Benítez ya estaba en desgracia, y no podría haber escrito esta última carta; y eso, por lo tanto, estaba claro que, aunque había firmado la anterior, una pluma más hábil que la suya las había escrito[1].
La carta del coronel Caminos tiene dos partes bien diferenciadas.
La primera es una larga exposición de los cargos formulados contra el americano Porter C. Bliss y el inglés Georges Masterman que habían sido declarados por Washburn como personal de la legación americana pero aun siendo extensa y llena de detalles respecto de la violación que el Gobierno Paraguayo observó en los deberes del ministro americano al momento de brindar protección a los mencionados conspiradores, Caminos, sin embargo, dice:
Si V.E. no quiere dar crédito a mis palabras, y puede todavía dudar de la veracidad de los informantes sobre que Bliss y Masterman son miembros importantes del complot, no puedo ofrecer a V.E. la presentación de documentos auténticos de la realidad del hecho para complacerle, y V.E. puede proceder en el caso de acuerdo con las leyes de su país, o como mejor le parezca[2] (foto)
Archivo Nacional de Asunción – AHRP – 4842 -1-12
Y respecto de este párrafo de Caminos, el ministro Washburn escribe en su obra:
En esta carta Caminos sin darse cuenta demostró que la carta no había sido escrita por él mismo, pero había sido preparado por la misma mano que había dictado las demás, ya que alude a que yo no concedí crédito a sus palabras. Como esta fue la primera carta que recibí de él, nunca podría haber expresado o mostrado ninguna duda en respecto de sus declaraciones oficiales; y este cargo en mi contra demostró de manera concluyente que había sido escrito antes de la llegada del Wasp, y cuando el escritor supuso que Benítez iba a llegar a firmarlo. Esto también fue evidente por las siguientes palabras que aparecía en otra parte de la carta: “Sin embargo, no puedo concebir cómo su propia conveniencia es incompatible con la expulsión de estas personas, mientras que su estancia allí debe dar lugar a aprensiones muy insatisfactorias, por el hecho de su implicación en una vasta conspiración, las declaraciones en respecto de lo cual afecta incluso a Su Excelencia.” Por supuesto nada de esto se habría escrito si López hubiera sospechado que la cuestión se resolvería con mi partida de viaje, buque que ya había llegado[3].
De esta manera, Washburn desnuda totalmente la acusación del Gobierno y la exhibe como un montaje preparado para incriminarlo antes de saberse que la cañonera americana Wasp arribaría en poco tiempo para llevarse a Washburn de vuelta a su país.
Por su lado, el después liberado Porter Cornelius Bliss, en su declaración jurada realizada ante el escribano público N. Callan de Washington D.C. de fecha 8 de marzo de 1869, incluida en el memorial de las investigaciones del Congreso Americano sobre los sucesos de San Fernando de 1868, manifestó respecto de su implicación en el complot:
El Sr. Washburn se negó a entregarnos, la legación estuvo rodeada día y noche durante dos meses por numerosos piquetes de la policía militar, y se produjo una larga correspondencia con el Ministerio de Asuntos Exteriores, durante la cual el Sr. Masterman y yo fuimos acusados de ser “miembros importantes de una conspiración contra el gobierno de Paraguay en combinación con el enemigo”, y además me acusaron de haber pertenecido a un comité revolucionario. que se había comprometido por escrito a asesinar al presidente López.
En el curso de esta voluminosa correspondencia diplomática, el Sr. Masterman y yo fuimos perentoriamente demandados cinco veces y, al final, se dieron numerosos extractos de lo que pretendían ser las confesiones de nuestros amigos que se habían entregado, y de otras personas, que todos se reconocieron culpables de conspiración e implicando en sus confesiones al Sr. Washburn y a nosotros mismos. Estas llamadas confesiones estaban irreconciliablemente en desacuerdo entre sí, e incluso se contradecían entre sí, y sabíamos que eran falsas en cada detalle[4]
En otro momento de su deposición notarial, Bliss afirma:
Baste decir que cuando las repetidas aplicaciones de la tortura nos habían obligado a suscribir confesiones de nuestra culpabilidad y acusaciones al Sr. Washburn como jefe de una gran conspiración, fuimos llamados a poner en forma narrativa estas declaraciones ficticias, que luego fueron publicados como folletos por orden de López. Estos panfletos fueron escritos por nosotros mientras estábamos encadenados.
(ver el panfleto mencionado en el sub-capítulo 8, al igual que otros mencionados).
Si bien en la primera parte de su carta Caminos es condescendiente con Washburn y sólo atina a describir la posición gubernamental sobre la responsabilidad y culpabilidad de Bliss y Masterman en el complot y la ilegal protección diplomática que recibieron en la Legación americana , en la segunda parte Caminos –y de manera sorpresiva e inédita en comunicaciones anteriores- entra de lleno y directamente a implicar a Washburn en la revolución haciéndole saber el contenido de las declaraciones de seis interrogados, todos ellos incriminando al ministro americano como cabeza de la revolución. Llama la atención que hasta pocos días antes, en momentos en que el canciller era Gumersindo Benítez, éste no había hecho cargos contra Washburn en ninguna de la copiosa correspondencia de los meses previos al 4 de septiembre cuando Caminos irrumpe con su libelo acusatorio coincidiendo la misma con el hecho de que unos días antes apareció la cañonera americana Wasp para retirar al ministro del país. La cañonera americana, pues, disparó el montaje de la trama.
Para esta segunda parte, Caminos irá exhibiendo a Washburn las acusaciones de las que es objeto por parte de varios implicados. El primero es Benigno López, hermano del mismo Mariscal-presidente:
Archivo Nacional de Asunción – AHRP – 4842 -1-12
Llevado ha sido siempre mi gobierno de este deseo, y penoso le es tener que ver a V.E., en boca de los traidores de la patria, como uno de tales […] Haré aparecer por delante a uno de los individuos de quien V.E. ha dicho que por primera vez ha tenido que oír hablar de él. Es Benigno López que en parte de sus declaraciones dice textualmente lo siguiente:…….[5] (Sic)
Caminos hace una extensa relación de las conversaciones que Benigno López declara haber tenido con Washburn en las que resaltan las relativas al dinero que Washburn recibió del declarante y del comandante aliado, Marques de Caxías, para llevar adelante la conspiración y la que guarda relación con un mapa o croquis que el declarante dice haber dado al ministro americano para ser entregado a los aliados a efectos de elaborar un plan para envolver al ejército paraguayo por la vía de Caapucú y Paraguarí.
Washburn –en su obra- reconoce que tuvo conversaciones con Benigno López, pero no con ese contenido y que esa misma conversación declarada también se observa en el caso de José Berges:
Por supuesto, se recurrió a este recurso para convencer (a) otros, como escenario de transacciones y conversaciones de carácter puramente imaginario no podría tener otro efecto más que mostrar la audaz mentira de López y su despreciable carácter, y es evidente que había sido preparado con la visión de que no debería (yo) sobrevivir para exponerlo y aunque el Wasp estaba en el río cuando llegó el despacho enviado a mí, estoy plenamente convencido de que incluso en ese momento López estaba decidido a que no escapara de su poder.
Benigno López también declaró sobre la supuesta conversación en la que Washburn se compromete a oficializar al nuevo gobierno resultante del complot:
Que además de estos trabajos de Washburn, favoreciendo a la revolución, él tenía que reconocer oficialmente en caso de un buen éxito al nuevo gobierno establecido por el golpe revolucionario, y en caso contrario avisar a los revolucionarios bajo su bandera.[6](Sic).
Al respecto de esta acusación el americano manifiesta:
Además (Benigno) dice que yo le había asegurado que, si la revolución tenía éxito y se instale el nuevo gobierno, inmediatamente yo lo reconocería como el gobierno del Paraguay, como ya lo había advertido al Departamento de Estado en Washington que tal cosa sería así, y estaba seguro que me apoyaría en ese trámite, y aceptar al gobierno revolucionario como la autoridad legal del país. Al poner esto en la declaración de su infeliz hermano, López no exhibió su astucia habitual; porque, aunque en el momento en que fue escrita él no tenía la intención que yo viva para refutarlo, sin embargo, si fuera publicada, su falsedad quedaría demostrada por el hecho de que Washington nunca había recibido tales despachos”[7]
Caminos hace una extensa relación de los supuestos varios encuentros entre el ministro americano y Benigno López también en Asunción, y entre ellos resalta aquel donde Washburn se queja abiertamente de la decisión de Solano López de abandonar Asunción y trasladarse a Luque pero no parece que esta sea una prueba contundente ya que –en realidad- dicha queja la hizo Washburn prácticamente en público al hacérsela a varias personas entre ellas al mismo cónsul francés Paul de Cuverville y al italiano, quienes no dudaron en mudarse a Luque, distinto de Washburn, que se quedó en Asunción desobedeciendo las órdenes del Supremo Gobierno lo que se interpretó como una muestra de su participación en la conspiración.
Por otro lado, Caminos hace saber a Washburn que en su declaración Benigno López afirma haberle entregado dinero -“mil onzas de oro sellado y quince mil pesos” (Sic) (Centurión), llegándose a la acusación más seria en el escrito del encargado de las Relaciones Exteriores Luis Caminos y que se refiere al supuesto entendimiento de Washburn con el enemigo –siempre declarado por Benigno López- para concretar el derrocamiento del presidente con ayuda del Marques de Caxías en ocasión en la que el ministro americano cruzó a las líneas aliadas a plantear una intermediación oficial para el cese de la guerra. Caminos trascribe de la declaración del imputado Benigno López:
“Que en Paso Pucú después de la vuelta de Washburn del campo enemigo trayendo las bases y la carta de Caxías al declarante (Benigno), éste dijo: “que si se consigue el resultado de la empresa (derrocar a López) podría contar con medio millón y un centenar más encima para no ir a Chile sino donde le diera la gana; que esto le dijo aludiendo que siempre Washburn decía que de aquí (el Paraguay) pasaría a la Legación (americana) de Chile””. (Sic). Benigno tambien declaró que: “Washburn por lo visto completamente comprado por el Marqués de Caxías, trajo de éste el encargo de proponer por su parte al Mariscala de una manera extra-oficial que renunciase al mando para hacerse de la paz” (Sic)(Centurión, 303).
Así pues, según declaraciones del hermano del Mariscal, Washburn recibió una oferta y una entrega de dos montos de dinero bien determinados y que “esta gratificación era por la eficaz cooperación a la causa de la revolución” (Sic) (Centurión, 302).
En la misma ocasión –sigue diciendo Caminos- Benigno López expuso un plan a Washburn para ser trasmitido a Caxías dibujado en la tierra, primeramente:
“..esa operación demarcando las posiciones de uno y otro ejército y demostrando que de ese modo quedaba el interior de la República abierto y sin obstáculo de pasar cualquier fuerza al Tebicuary por Caapucú y hacer un movimiento rápido hasta Paraguarí que no estaba distante, y ponerse en contacto con la revolución dominando esta fuerza combinada los partidos más importantes de la República, así como la capital por la vía férrea” (Sic) (Centurión, III, 298)
Inmediatamente después, y conforme a la declaración, Washburn se aseguró de ponerlo en un papel con un lápiz que López tenía en un bolsillo de su chaleco. Caminos también se refiere a la supuesta manifestación de Washburn a Benigno López sobre la necesidad que el Marqués de Caxías establezca “las bases para realizar el cambio de Gobierno” (Sic), y manifiesta a continuación:
Que la intención del declarante (Benigno López) al hacerle la delineación de aquella operación (dibujada en un papel por Washburn-ver sub capítulo 11), era que manifestase Washburn a Caxías y si no le dijo expresamente no fue sino por que comprendía demasiado bien que Washburn lo haría precisamente, lo cual en efecto, quedó justificado no solo con el hecho posterior de haber realizado el enemigo ese plan sino por lo que el mismo Washburn a su vuelta le trajo la comunicación de Caxías con las bases para realizar el cambio de Gobierno, según tiene declarado anteriormente” (Sic). (Centurión, III, 298)
En este párrafo de la carta de Caminos se utilizó hábilmente un hecho real que fue aquel por el que Washburn a su vuelta de intentar la intermediación entre López y sus enemigos –Marzo de 1867- trajo realmente las condiciones de Caxías para un cese de la guerra y entre ellas se consignaba un cambio de Gobierno con la salida de Solano López del país tal como ya Mitre le había manifestado en la entrevista de Yatayty Corá pero el caso fue presentado por Caminos –o por el escribiente de la carta que Washburn sospecha que fue el Padre Maiz- como parte del complot contra Solano López. Por otro lado, Caminos falta a la verdad ya que la operación militar real llevada a cabo por Caxías entre Junio y diciembre de 1867 fue otra muy distinta a la del supuesto plan de Benigno López como se vió en el sub-capítulo 11.
Justamente el propio Caminos lo pone de manifiesto unos párrafos más abajo cuando dice relativo a otra declaración de Benigno López:
“Que después estando (Benigno) una mañana a visitar a Washburn en su casa hablaron sobre la noticia de que los aliados habían llegado al río, echando a pique dos buques, a lo que dijo Washburn que habían hecho mal en perder esos buques….[…](Sic) (Centurión, III, 299).
Caminos se abstuvo de decir que esa llegada de los aliados al río se trataba de la culminación de la verdadera maniobra aliada de envolvimiento por Tuyú-cué y San Solano, al Este de Humaitá, que empezó en julio de 1867 y que culmina en noviembre del mismo años con la toma de la pequeña fortificación de Tajý sobre el rio, al norte de Humaitá, lo que logra encerrar a Solano López y unos 15.000 hombres en una operación que muy lejos estaba de ser la que Benigno López dibujó en la tierra y Washburn en un papel para mostrársela a Caxías y que pretendía llegar hasta Asunción por Caapucú y Paraguari por ferrocarril en concordancia de la llegada de la flota imperial a Asunción; de hecho esos buques no llegan a Asunción hasta dos meses después de la toma de Tajy, recién en febrero del año siguiente.
En su último libro, Washburn y la conspiración paraguaya, (Servilibro, 2023), la mediática historiadora diplomada Noelia Quintana Villasboa, en un intento de demostrar que el libro que tradujo es de autoría del cónsul francés Paul Cuverville, pone en boca de éste la misma acusación contra Washburn en lo tocante al ya mencionado plan u operación de Benigno López escrito en un papel y pasado a Caxías para su cumplimiento. Pasados más de 150 años de aquel envolvimiento de Humaitá con salida al río en Tajy, parece que el mismo no está en conocimiento de esta profesional de la historia. En dicho libro se trascribe “in extenso” el mismo oficio del 4 de septiembre de 1868 de Caminos a Washburn que estamos analizando Quintana Villasboa escribe:
Leemos en el relato de Cuverville que Washburn se ofrece como mediador entre López y Caxías, y abusando de dicha encomienda en calidad de negociador de una mediación en el conflicto, establece con el comandante brasileño una comunicación permanente, haciéndole saber sobre los planes del ejército paraguayo, como el mejor de los agentes encubiertos” (Sic) (p. 18)
La historiadora se equivoca por partida doble pues lo que Caminos dice en su libelo acusatorio es que Benigno López pasó un dibujo a Caxías –via Washburn- mostrando los pasos seguros por donde transitar en los extensos pantanos del Ñeembucú y llegar hasta Paraguarí por Caapucú y nada dijo de los planes paraguayos de sus propias operaciones como lo hace la señora Quintana. Por otro lado –y salvo error u omisión- la única supuesta correspondencia entre Caxías y Benigno López que Caminos expone es la que trae en propia mano el ministro americano a su vuelta de la fracasada misión de negociación de un cese de la guerra en marzo de 1867 en la que se establece que no se negociará con Solano López y que debe marcharse del Paraguay –sin más- abandonando el Gobierno por lo que Quintana no puede hablar de una “comunicación permanente”, que no es más que otro capítulo de la falacia lopista.
El libelo acusatorio sigue presentando otras declaraciones de Benigno López en las que no hace más que repetir los varios encuentros del mismo con Washburn para el mismo fin, ir ajustando los detalles de la revolución, incluso se cita que todos los documentos emitidos en función a la conspiración fueron guardados en un sobre y cerrado fue entregado al americano para su custodia. Todo esto no pasó de ser menciones o citaciones pero no se señalan en el libelo acusatorio pruebas palpables claras e incontestables de la conspiración. En lo que fue la última referencia, Caminos escribe:
Que además de estos trabajos de Washburn, favoreciendo a la revolución, él tenía que reconocer oficialmente en caso de un buen éxito al nuevo gobierno establecido por el golpe revolucionario, y en caso contrario avisar a los revolucionarios bajo su bandera. (Sic) (Centurión, III, 304).
En la parte siguiente, Caminos presenta las distintas declaraciones de otros acusados y que habrían tenido contacto personal con Washburn y así aparecen Venancio López que dijo que Washburn era el principal promotor de la conspiración, reconoce haber recibido comunicación del Marques de Caxías por manos del americano en la cañonera Wasp de su país (luego se contradice ya que la llegada del Wasp a Asunción era sólo un objetivo de Washburn) y que éste guardaba los documentos de la revolución. Aquí el libelo acusador contiene un punto obscuro ya que el “Wasp” llegó al Teatro de Operaciones el 20 Mayo de 1868 (Washburn, pero sin permitirse su paso aguas arriba de Corrientes y la supuesta carta de Caxías a Venancio López traída por el “Wasp” habría sido remitida en ese mismo mes a Venancio cuando ya estaba descubierta la supuesta conspiración, ¿porque Caxías usaría el Wasp para enviar esa correspondencia si ese buque estaba en su retaguardia detenido?.
En la declaración de Venancio López se cita por primera vez un dicho de Washburn sobre una intervención de la flota brasileña en Asunción:
…pero Caxías no ha de perder tiempo, se ha de apresurar a tomar Humaitá, en seguida ha de extender la escuadra para acá (Asunción) y mover el ejército sobre el Tebicuary” (Sic) (Centurión, III, 307)
Así es como acuden en las declaraciones de los hermanos López, Benigno y Venancio, las dos operaciones militares que Caxías habría arreglado con Washburn para tomar Asunción y hacer triunfar a la revolución, Benigno con su versión de la maniobra aliada terrestre por Caapucú y Paraguarí y Venancio con su versión de un desembarco marino en Asunción, pero llama la atención que uno de los hermanos no cita la versión del otro y viceversa lo que pondría en duda cual sería la verdadera operasción final.
También Caminos presentó la declaración de José Vicente Urdapilleta, quien dijo haber escuchado de Benigno López que entregó a Washburn 1.500 onzas de oro y 25 mil pesos (montos que difieren con los señalados en la declaración de Benigno), que Washburn manifestó que mantendría “una estación naval con uno, dos o tres cañoneras de su nación en el puerto de la Asunción para proteger y recibir a los insurgentes” (Sic). Urdapilleta dio detalles de varios encuentros y comentarios de Washburn en Asunción sobre la revolución.
Urdapilleta brinda mas datos del que sería el desembarco aliado en Asunción según se lo había dicho Washburn:
que el ministro americano debía obrar en combinación con la fuerza revolucionaria para proteger el movimiento, haciendo arribar sus corazas hasta la Asunción con gente de desembarco, que debía dejarse en tierra en la misma capital o en cualquier otro punto que fuera mas conveniente… (Sic) (Centurión, III, 308)
También declaró en contra de Washburn el uruguayo Francisco Rodriguez Larreta, ex miembro de la legación uruguaya en Asunción, quien manifestó que Washburn opinaba que los aliados no debían exigir la separación de López del Gobierno pero que dada la situación del país “creía conveniente la separación como el medio más conducente para una pronta terminación de la guerra actual y que por esta razón se había decidido a prestar su apoyo a los revolucionarios” (Sic)(Centurión, 311).
Por su parte, otro declarante, el antiguo hombre fuerte del gobierno uruguayo del Partido Blanco, Antonio de las Carreras, habló de cifras pagadas a Washburn por sus servicios a la revolución unos “ciento cuarenta mil pesos en billetes” (Sic) que le fueron remitidos por Benigno López por medio de dos mujeres criadas de Benigno que los llevaban en canastos. Ya son, pues, tres cantidades distintas las que habría recibido Washburn según este libelo acusatorio.
Llegando al final del libelo acusatorio, Caminos dice:
“Tambien V.E. (vuestra excelencia) anda en boca de Leite Pereira, Antonio Vasconcellos y otros individuos de la revolución que más o menos han estado en conocimiento de la importante parte que V.E., dice, ha tomado en ella” (Sic) (Centurión, III, 314).
Y finalmente, Caminos trae a José Berges como testigo de la inclusión de Washburn en el complot. Berges ratificó que Benigno López dio dinero al americano. En su defensa contra las acusaciones que le son presentadas sobre la fortuna que habría recibido de Benigno López, más tarde Washburn afirmó que sería ridículo haber aceptado ese dinero pues siendo billetes paraguayos no tenían ningún valor en su país adonde se dirigió al salir del Paraguay y que así no le hubiera servido de nada ese dinero.
El libelo acusatorio del ministro Luis Caminos no presentó más que declaraciones arrancadas de personajes que en su totalidad sufrieron torturas y apremios físicos y que finalmente fueron ejecutados o muerto durante la guerra no teniendo así la más mínima posibilidad de confirmar o desmentir en la pos guerra sus supuestas declaraciones ante los jueces de San Fernando. Benigno López, hermano del Mariscal fusilado en Itá Ybaté el 21 de diciembre de 1868, cuatro meses después de redactado el libelo acusatorio de Caminos. José Berges, ex-canciller fusilado el 21 de diciembre de 1868. Venancio López, hermano del Mariscal y ex ministro de Guerra y Marina muerto por inanición, enfermedad y malos tratos en febrero de 1870 en la picada Chiriguelo antes de llegar a Cerro Corá. José Vicente Urdapilleta, particular, fusilado en Ita Ybate el 21 de diciembre de 1868, Francisco Rodriguez Larreta, ex diplomático uruguayo fusilado en San Fernando el día 22 de agosto de 1868, José María Leite Pereira ex gerente del consulado de Portugal fusilado en Itá Ybate el dia 21 de diciembre de 1868,Antonio Vasconcellos: fusilado en San Fernando el 26 de agosto de 1868, día en el que solano López abandonó ese lugar y finalmente el uruguayo Antonio de las Carreras, fusilado en San Fernando en agosto de 1868. Ninguno pudo hablar.
Por otro lado se denota que Caminos, o el redactor del libelo, usó el hecho real que Washburn pasó a las líneas aliadas en marzo de 1867 en busca de su correspondencia y lo usó para montar toda una trama en su alrededor para atribuir al americano un nexo con el Marqués de Caxías aunque el Ministro Caminos era conocedor de muchas de las realidades que ocurrieron en la retaguardia aliada pues el mismo Washburn puso en conocimiento de las mismas al propio Solano López por lo que –prima face- parecería que el oficio que hizo de libelo acusatorio fue redactado a manera de mostrar al mundo la catadura moral del americano al que todos los dedos apuntaban. Esas circunstancias ocurridas detrás de las filas aliadas demostraron luego que –lejos de ser Caxías quien congeniara y estableciera con Washburn todos los pasos para derrocar a López- fue quien más se opuso al americano en cuanto a lo que éste se habría propuso supuestamente.
No obstante la larga descripción de los cargos que le fueron citados al ministro americano Charles A. Washburn y hasta de tratarlo de traidor según los que le implicaron en el complot, el Gobierno Nacional no concretó su propósito -si es que tenía alguno- en una decisión final y definitiva sobre el americano y sólo atinó a reconocer que sólo pudo aportar declaraciones de los procesados pero ninguna prueba fáctica, y se remitió a plasmar una especie de llamado de atención al ministro excusándolo dada su investidura, lo que nos permite colegir que todo se montó para que la acusación tome rápido estado público (fue publicado en El Semanario y en Europa) cuando ya se sabía que la cañonera Wasp había llegado al Paraguay a buscarlo (el 28 de agosto, días antes de remitirse el oficio a Washburn) y su retiro del país era inminente como inminente sería que Washburn denunciara las torturas y fusilamientos de los implicados en el supuesto complot, tal como lo hizo apenas llegó a Buenos Aires.
Caminos se despide de Washburn con las siguientes palabras:
Por todo esto, y por los antecedentes de que V.E. tiene ya conocimiento, mi gobierno estaría justificado de tiempo atrás para cesar toda correspondencia con un ministro que, en las graves circunstancias porque puede pasar el pueblo paraguayo, aparece en boca de los infames traidores de la santa causa nacional como uno de tales.
Mi gobierno, sin embargo, siempre solícito a dar las pruebas más inequívocas de su alta consideración y estima hacia el Gobierno de la Gran República Americana no lo hace, y como una nueva prueba de esto se limita a enviar a V.E. los pasaportes que reiteradamente ha solicitado para salir del país, siendome agradable anunciarle que la “Wasp” que ha venido a llevar a V.E. se halla en su espera en la Villeta y que un vapor recibirá a V.E. y su séquito mañana a la hora que guste en el puerto de la Asunción.
ANA-AHRP-4842-1-12
Hemos creído oportuno presentar a continuación una cronología de la actuación de Charles Ames Washburn en el Paraguay y para ello es necesario hacer un relato de cómo fueron sus movimientos desde que llegó al Paraguay en 1861, su retiro temporal, su retorno en 1866 y hasta que se retiró definitivamente en 1868 en base a publicaciones de El Semanario –órgano oficial del Gobierno Nacional de la época y de la obra que el propio Washburn publicó en su defensa en la pos guerra y así se podrá determinar que la acusación del Gobierno Paraguayo careció de veracidad toda vez que la realidad fue otra. Varias de las manifestaciones de Washburn en su obra tienen el respaldo de la documentación del Departamento de Estado de los Estados Unidos de América. Queda a criterio del lector el desenlace de este asunto.
Cronología de la estadía de Charles Ames Washburn en el Paraguay.
(ES: El Semanario, THP: The History of Paraguay – Charles A. Washburn)
(CAW: Charles Ames Washburn. FSL: Francisco Solano López)
1
30/11/1861
CAW es acreditado como Comisionado del Gobierno de EEUU ante Paraguay (ES. No. 403, p.1)
2
24/09/1862
CAW regresa de BsAs en el Buque Paraguari junto con Luis Caminos y el Encargado de Negocios de SMB William Doria (ES. No. 442, p.4)
3
XX/11/1864
Primeros desacuerdos entres CAW y FSL por la gestión del primero en favor de la partida del Ministro Brasilero luego de la captura del Marqués de Olinda (THP. V2, p.4)
4
16/01/1865
CAW Sale de Paraguay, a bordo del Ranger, con licencia del Gobierno de EEUU. Espera estar fuera seis o siete meses. Previo a su salida, se entrevista con FSL quién confía que la guerra durará tres o cuatro meses y será cuando él (FSL) esté dispuesto a escuchar las Propuestas de Paz del Imperio. (THP. V,. p.10).
5
06/09/1865
Sale de New York con rumbo a Paraguay. (THP.V2, p.114).
6
03/10/1865
Llega a Rio de Janeiro. Se entera del bloqueo del Río Paraguay desde Dos Bocas. Solicita al Almirante Godon, Comandante de la Flota de EEUU en Sudamérica, que le proveea de una cañonera para llegar a Asunción. (THP.V2, p.114)
7
14/11/1865
CAW se entera de la negativa de Godon a llevarlo a Asunción. (THP.V2, p.115)
8
21/11/1865
Fecha estimada. CAW llega a Corrientes y se entrevista con Mitre para solicitar paso al Paraguay. Este le contesta que debe tener aprobación conjunta de los representantes de Brasil y Uruguay, a quienes envía una nota al respecto. CAW retorna a BsAs junto a su familia. (THP.V2, p.116)
9
28/11/1865
Fecha estimada. CAW se reune en BsAs con Elizalde,Ministro de Relacions Exteriores, quién le da seguridades que Mitre le dejará pasar. Le provee de una carta al respecto (THP.V2, p.116)
10
19/12/1865
Fecha estimada. Llega a Paso de la Patria, Argentina, para entrevistarse con Mitre.Se entera que este aún sigue en Corrientes. Se entrevista con Gelly y Obes, quién envía un emisario a reunirse con Mitre. Este último, en respuesta, le dice que sigue indispuesto, pero que el tema del cruce hacia Paraguay lo puede conversar directamente con el Almirante Tamandaré. (THP.V2, p.117)
11
20/12/1865
Fecha estimada. Se reune con Tamandaré quién le niega el paso y que Brasil está en su derecho al hacerlo así. Despide a CAW al son de la marcha “The Rogues March”. (THP.V2, p.118)
12
XX/06/1866
Corrientes. CAW sigue esperando autorización para pasar a Paraguay. Ottaviano, Representante Brasilero en el lugar teme que se de un enfrentamiento con EEUU por el retraso a CAW. (THP.V2, p.122).
13
04/07/1866
Tamandaré ofrece dinero a CAW para callar su pretensión de pasar a Paraguay. (THP.V2, p.122)
14
07/07/1866
El Gobierno de Paraguay espera que haya guerra entre entre los Aliados y EEUU por el bloqueo a CAW. (ES.No.637).
15
22/07/1866
CAW escribe una larga nota de Protesta a Mitre y los aliados por la larga detención en Corrientes. (THP.V2, p.125).
16
25/07/1866
CAW recibe instrucciones de Seward, Secretario de Estado de EEUU quién molesto e indignado por tal retraso ordena que el Almirante Godon proceda con una Cañonera a llevar a Asunción. (THP.V2, p.125)
17
XX/09/1866
EEUU avisa a sus Ministros en Rio y BsAs que de impedirse el paso de CAW a Paraguay, pidan sus pasaportes y se retiren. Paso previo a un eventual enfrentamiento militar. (THP.V2, p.130)
18
24/10/1866 CAW se embarca en el Shamokin rumbo a Paraguay. Sospecha que le dieron un buque muy grande y de dificil maniobrabilidad para que no llegue a Paraguay. (THP.V2, p.130)
19
02/11/1866 El Shamokin llega a Tres Bocas. Es abordado por el Comandante del primer buque Brasilero quién deniega el paso del Shamokin. El Capitán Crosby indica que tiene órdenes de pasar el bloqueo. (THP.V2, p.132)
20
03/11/1866
El Shamokin carga sus cañones y se prepara para enfrentar a los buques Brasileños. A las 10 AM espera la palabra final de Tamandaré antes de proceder. (THP.V2, p.133)
21
03/11/1866
A las 10 AM se entrevista Tamandaré con Crosby. El primero ofrece un buque brasileños para llevar a CAW hasta donde quiera. Este rechaza el ofrecimiento por extemporáneo y que el problema ha escalado a nivel nacional en su país. Que tiene órdenes de proceder a Paraguay con el Shamokin a no ser que sea detenido por la fuerza. A esto responde Tamandaré que no quiere guerra con EEUU y por ello le dejará pasar, aunque elevará una Protesta formal. CAW responde que puede protestar todo lo que quiera, pero que él continúa su viaje a Asunción según sus órdenes. (THP.V2, p.133)
22
05/11/1866
A las 2 PM el Shamokin pasa junto a toda la flota Brasilera y justo cerca del Buque insignia de Tamandaré, donde toca la misma banda de músicos que meses atrás despidió a CAW con negativa de paso. (THP.V2, p.135)
23
05/11/1866
Llegan a Curupayty y son recibidos por los Paraguayos como presagio de paz, según había abrigado Solano Lopez. Conversa con los extranjeros, sobre todo ingleses al servicio del Gobierno, que su llegada significa un gran alivio para ellos, pues se dan cuenta que la guerra va muy mal y que FSL está desesperado y volviendose sanguinario. Esperan que la presencia de un Ministro de una nación poderosa sea como un freno para esa conducta. (THP.V2, .136/7).
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08/11/1866
CAW llega a Asunción. Recepción amable y cálida, por parte de amigos y conocidos, considerando su venida como un alivio, con esperanza de un fin de la guerra próximo, así como algo de protección ante el peligro de FSL cada vez mas peligroso. (THP.V2, p.141)
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10/11/1866
Gran alegría y comentarios en Paraguay por la llegada de Washburn, significando la Libre Navegación para las banderas extranjeras ajenas a la Guerra. (ES.No.655)
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XX/12/1866
A su llegada CAW encuentra a conocidos y amigos encarcelados por motivos poco claros o sin motivo alguno. Ayuda en lo que puede y esto no es bien visto por las autoridades. (THP.V2, p.142 /152)
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20/12/1866
Invitado por FSL, vía José Berges, a Paso Pucú. (THP.V2, p.156)
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22/12/1866
Llega a Humaitá. Entrevista con Lopez. Libera prisioneros americanos tomados durante la toma de Corrientes. Consigue reposición de dineros de compatriota suyo saqueado en Bella Vista,Corrientes. Se entera del temor que todos tienen a FSL, nativos y extranjeros. (THP.V2, p.156),
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26/12/1866
CAW envía correspondencia a su Gobierno, vía Mitre. Dos oficiales Paraguayos llevan los pliegos. (ES.No.662. p.6),
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XX/02/1867
Fecha estimada. Se captura un periódico extranjero en una escaramuza y de eso se deduce que EEUU intenta buscar la paz. Se lee que fueron enviadas instrucciones a los Ministros en Brasil, Argentina y Paraguay al respecto. Sin embargo, CAW no recibió nada al momento, ya que no tuvo comunicación alguna con el exterior desde su llegada -no vino buque alguno-. Por ello CAW propone ir al Cuartel Aliado en búsqueda de posible correspondencia de Gobierno. La propuesta la hace a José Berges, quién de inmediato telegrafía a FSL. Este último responde inmediatamente ofreciendo todas las facilidades para llegar hasta las lineas aliadas. (THP.V2, p.165/166).
31 07/03/1867 CAW sale en el Olimpo rumbo a Humaitá. En el mismo viaje va Benigno Lopez, con quién conversa en medio de una gran desconfianza mútua. Hablan de posibles movimientos de los aliados y que pasaría si ganan o pierden en esos movimientos. Benigno comenta que el Imperio tomó crédito y que sus acreedores no dejarán que pierdan la guerra por temor a que repudien la deuda. (THP.V2, p179).
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09/11/1867
CAW llega a las 11 am a Paso Pucú. Se entrevista con FSL quién se muestra muy esperanzado en un resultado ventajoso. CAW tiene menores expectativas y va en busca de su correspondencia oficial, que de tener instrucciones sobre la búsqueda de paz, hará todo lo posible. Prepara una carta para Caxias para el caso en que no le fuera posible alcanzar el Cuartel Aliado, diciendo en ella que hace tiempo no recibe correspondencia oficial de su Gobierno y que se ha enterado de que haya una posible mediación de Paz a la presente guerra; que estaría muy deseoso de saber si tal mediación sería aceptada por los aliados. (THP.V2, p.180/1)
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11/03/1867
CAW pasa al Campamento Aliado. Va escoltado por 30 soldados paraguayos, mas Thompson y Pancho Lopez. Este último se muestra muy mal educado y casi causa un enfrentamiento. CAW continúa hasta Tuyutí donde es recibido por Caxias. Este pregunta si CAW viene por pedido de FSL o por su iniciativa, la respuesta es a iniciativa propia. Pide correspondencia de su país y le dicen que no ha llegado. Pregunta CAW si el Ministro americano vendrá al TO a lo que Caxias responde que tiene una carta donde dicen que el Comandante Americano de la flota hizo una maniobra para que no fuera el Ministro. (ES. No. 673, p.4) (THP.V2, p.183)
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12/03/1867
CAW lee periódicos de BsAs donde se entera que los Aliados no aceptan la mediación de EEUU. A las 10 de la mañana desayuna con Caxias quién oficialmente le comunica que los Aliados no aceptan la mediación propuesta. Que no negociarán con FSL, que debe abandonar el país y solo entonces se podrá llegar rápidamente a una honorable Paz para todas las partes. Caxias dice que la visita de CAW no fue bienvenida y que si necesita recibir su correspondencia oficial no necesita cruzar las lineas enemigas, él se lo hará llegar. CAW escribe a sus colegas Ministros en BsAs y Rio informando de la conducta del Almirante Godon, quien saboteó la propuesta de mediación de EEUU y que quizás si hubiera puesto su flota entera al servicio de su Ministro en BsAs, se podría lograr la aceptación de la mediación. CAW pregunta a Caxias como haría si FSL no se saliera del país, pues eso llevaría a una larga y costosa continuación de la guerra. Caxias responde que “a enemigo que huye, puente de oro”. Por otra parte un oficial Polaco de Ingeniería le comenta que tiene reconocido todo el territorio Paraguayo desde el Campamento de López hasta Villa Franca. (THP.V2, p.184).
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13/03/1867
Retorno del campamento aliado al campamento Paraguayo. A las 7 am, una escolta de 40 hombres, bien montados y uniformados se prepara para salir. Al instante de su salida, llega el Ingeniero Polaco trayendo una copia de los mapas del campamento paraguayo, con detalle de posiciones de baterías, tropas, Cuartel General, y todas las defensas que podrían oponer al avance de los aliados. Todo esto con la aprobación de Caxias con un mensaje implícito de que conocía todos sus recursos y que lo mejor para FSL sería aceptar el “puente de oro”. Llega al Cuartel de Lopez a las 10 am. Es invitado inmediatamente a desayunar con FSL y su entorno, el Obispo (Palacios?), General Barrios, Gral. Bruguez, Dr. Stewart, Coronel Wisner, Pancho Lopez y otros, todos muy deseosos de tener novedades. FSL esperaba confirmar las noticias extraidas bajo torturas a prisioneros aliados, en tanto que CAW le comenta todo lo contrario, que los aliados continuarán la guerra, que Mitre fue bien recibido en BsAs a su regreso, que el Imperio no tiene problemas en recaudar fondos para la guerra. Que Caxias es un militar de mayor edad, muy bueno para disciplinar su ejército, que halló el campamento muy ordenado, que fue invitado a comer a su mesa las mejores carnes y frutas traídas desde Montevideo. Y que no aceptan la mediación de EEUU, que continuarán la guerra hasta destruirlo, que le ofreció un “puente de oro”, que tienen los planos de su Campamento. Al ver los planos del campamento FSL comentó que hay espías en sus líneas para pasar tal detalle de información. (THP.V2, p.186)
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14/03/1867
CAW regresa del Campamento Aliado (ES. No. 673, p..4)
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20/03/1867
El WASP, cañonera de EEUU llega a Itapiru con correspondencia para CAW (THP.V2, p.196)
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21/03/1866
CAW sale para Humaitá y llega el 23/03 THP.V2, p.196
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23/03/1867
La correspondencia traida por el Capitan Kirland, del WASP, incluye la esperada instrucción para la mediación ofrecida por EEUU. Además una carta del Ministro en BsAs, quién informa de la negativa de los aliados a aceptar la mediación, pero que él piensa que los puntos de diferencia entre los beligerantes no son tan irreconciliables y que se podría encontrar la forma de que las partes abran negociaciones para el cese de la guerra. (THP.V1, p. 96).
El 23 de Marzo de 1867, Charles Ames Washburn escribió al Marqués de Caxías en contestación a la afirmación de éste le diera en su visita a Tuyutí del día 11, respecto de que el brasileño no trataría ni negociaría personalmente con Francisco Solano López, diciendo Washburn que la propuesta de los E.E.U.U. no contemplaba la opción de retirar a López del Paraguay, que defendía el principio de que cada nación tiene el incuestionable derecho a elegir su gobierno, que ninguna potencia tiene el derecho de imponer a un vecino país un gobierno no seleccionado por su pueblo. Por ello –decía Washburn- los E.E.U.U. no pueden ver con buenos ojos que tres países aliados deban imponer otra autoridad que la elegida por la gente de Paraguay. La misiva molestó bastante al Marqués de Caxías y a sus aliados, al punto que se desquitaron de Washburn reteniendo envíos de encomiendas encargadas en Buenos Aires por el ministro. (THP.V2, p. 198)
Consideraciones finales
Esta posición tanto de los Estados Unidos y del mismo Washburn, quien no podía oponerse a la política manifiesta de su país respecto de la situación de Francisco Solano López, es lo que se ha leído como declaración del uruguayo Rodríguez Larreta y que es natural que el mismo Solano López lo haya sabido de boca del mismo Washburn, pero en el libelo acusatorio se agrega a esa declaración que Washburn entendía que aún así Solano López debía ser derrocado.
¿Cómo podría un ministro (embajador) de los E.E.U.U. coadyuvar a una revolución con el propósito de derrocar a un presidente si ello suponía ir a contramano y desobedecer la política expresa de su propio país que el mismo se dejó clara en una correspondencia oficial al comandante de los aliados?.
La gran inconsistencia del libelo acusatorio y la evidente falsedad de sus cargos radica en el hecho que tanto en la letra del Tratado Secreto de la Triple Alianza y la misma política brasileña desde el mismo principio de la guerra fue que Francisco Solano López debía ser depuesto de la presidencia del Paraguay y que miembros de la familia López no podían asumir en lo sucesivo responsabilidades gubernamentales, en una palabra, para los brasileños esa familia estaba inhabilitada para ocupar cargos políticos en Paraguay según rezaban las Instrucciones de Antonio Saraiva a Otaviano de Almeida del 5 de Mayo de 1866 y al Marques de Caxías del 6 de Mayo de 1867 (Nabuco, Obras Completas, Um Estadista do Imperio, Vol III. p. 86 ). Si el propio Caxias ya fue instruido por la cancillería de su país en ese sentido, ¿porque promovería el derrocamiento de Francisco Solano para permitir la elevación a la presidencia de su hermano Benigno con quien -supuestamente- se carteaba?. Lo de un Caxías apoyando una conspiración en contra de la política de su propio Emperador no tiene lógica y va contra todo sentido común.
Otra de las inconsistencias del libelo es el evidente divorcio entre las supuestas maniobras militares montadas para el éxito de la conspiración, la terrestre por Caapucú según la versión de Benigno López y la fluvial con el desembarco de tropas aliadas en Asunción según la versión de Venancio López con la realidad final resultante ya que es sabido que los aliados no usaron el supuesto camino por Caapucú y Paraguari y cuando tres de sus cañoneras llegaron a Asunción en febrero de 1868, no hicieron mas que disparar una veintena de cañonazos que no produjeron bajas y solo atinaron a uno de los adornos del Palacio de López en construcción, volviendo a sus bases sin dejar un solo hombre en la orilla derecha del Paraguay. Aquellos dos planes nunca se cumplieron, ni juntos, ni separados, lo que supone que aquello no pasó de ser una especie de puesta en escena.
El libelo acusatorio del Ministro Caminos no tiene sustento alguno como prueba contra Washburn, pero sirvió de mucho para ser publicado en Europa en dos ocasiones, en la primera transcripto en panfleto anónimo, en idioma francés en Paris, en 1868, que la historiadora paraguaya Noelia Quintana tradujo y publicó en 2023 como de autoría del cónsul francés (Washburn et la conspiration paraguayenne, Dubuisson et. Cie.) donde se ataca a Washburn, se trascribe el libelo acusatorio y se niegan las torturas aplicadas a los implicados en el complot y su fusilamiento.
En la segunda, el francés Claude de la Poepe (seudónimo del publicista pro-Paraguay Charles Expilly) también anatematizó a Charles Washburn en su obra “Politique du Paraguay” (Dubuisson et Cie.) publicado en Paris en 1869 donde de nuevo se repiten las acusaciones a Washburn de liderar el complot y –por supuesto- también se niegan torturas y fusilamientos durante el proceso judicial seguido a los conspiradores (ver sub capítulo 8). Incluso en defensa de su cuestionada participación en los procesos de San Fernando y a modo de descargo, el padre Fidel Maiz insertó en su obra “Etapas de mi Vida” (Heyn, 1986, 193) todo el texto de la obra de de la Poepe (Expilly), en idioma español.
Cuando estas publicaciones vieron la luz en Francia, obviamente realizadas por mandato del Gobierno Nacional, los aliados ya habían publicado todas las atrocidades cometidas por Solano López con la población paraguaya y la imagen del Paraguay se vio seriamente afectada.
Todo ocurrió muy rápido entre el 4 de septiembre de 1868 cuando el Ministro Caminos envió su libelo acusatorio a Washburn y el año 1969 cuando el mismo se publicó en Paris por segunda vez, quedando así claro el propósito del Gobierno de Solano López de exponer a Washburn a la condena internacional y la de su propio país más que a pretender llevarlo al paredón de fusilamiento.
[1] Washburn, Charles A., The History of Paraguay, Tomo II, p. 410.
[2] A,N,A, – AHRP . 4842. Puede también verse en Centurión, J.C., Memorias o reminiscencias….,Vol. 3 – Bioblioteca Virtual del Paraguay, p. 294
[3] Washburn, ob. cit. pp. 411/2.
[4] Porter C. Bliss and Geo. F. Masterman – Memorial of Porter C. Bliss and Georges F. Masterman in relation to their imprisonment in Paraguay by the president of the republic, and subsequently on the gunboat Wasp and the flag-ship Guerriere, of the South Atlantic Squadron, by United States officers. March 16, 1869 – 41st. Congress – 1st. session – House of Representatives.
[5] A.N.A. – ahrp – 4842
[6] Centurión, Juan Crisóstomo., “Memorias o reminiscencias de la guerra del Paraguay”, Biblioteca Virtual del Paraguay, Tomo III, p. 303/4
[7] Washburn, C., Ob. Cit. p 413