5. Las ultimas acciones en Cerro Corá.

Análisis de la actuación del Mcal. Francisco Solano López el último día de su vida.

Por José Luis Martínez

Promediando el mes de Marzo es común debatir respecto de las acciones de aquella mañana y mediodía del 1° de Marzo de 1870 y fundamentalmente sobre la actuación del Marical-Presidente Francisco Solano López y respecto de esto último hemos leído términos acusatorios como los de “huyó del combate”, “se escapó”, “abandonó a su familia”.

Para salirnos de la duda se hará un ejercicio consistente en recurrir al plano de Cerro Corá confeccionado por el Cnel. Silvestre Aveiro en 1898, uno de los últimos paraguayos en ver con vida a Solano López –acompañándolo hasta el Nigui- donde se señalan los lugares de los combates del y cercanos al “Paso Tuyá” del Aquidaban, el itinerario de López hasta el lugar de su inmolación, la ubicación de los distintos carromatos del Cuartel General, de Alicia Lynch, de Juana P. Carrillo y sus hijas y del Gral. Patricio Escobar. Sobre este plano hemos confeccionado una infografía que adjuntamos al final del cada paso descripto y que contiene la cronología (ver por números) y la descripción de la acción además de todo lo ya señalado.

Desarrollaremos cada punto de la cronología –muy resumidamente- y agregaremos algún comentario en base a las obras que hacen de fuente que son las de Juan C. Centurión y la de Silvestre Aveiro.

Paso 1.

Traición de S. Carmona y C. Solalinde: esto se da –un día antes del 1° de Marzo-  en el “Paso del arroyo Tacuaras” donde el Cnel. S. Carmona indica a los aliados el camino para rodear el retén paraguayo dispuesto allí y si bien el Dr. Cirilo Solalinde se abstuvo de proveer información a los aliados cuando los encontró allí ya había desertado y abandonado el campamento de Cerro Corá faltando a su compromiso de acompañar a Solano López como su médico personal. La distancia entre el “Paso Tacuara” y el siguiente paso (sobre el río Aquidaban) es de 5 kilómetros. Croquis:

Paso 2

Ataque del Gral. Cámara. La columna aliada que llega a Cerro Corá –por el noroeste- es comandada por el Gral. Cámara y está formada por infantería, caballería y parte de la artillería que pudo pasar –con atraso- el arroyo Tacuaras. El asalto aliado es enfrentado por sólo dos cañones paraguayos y unos 100 hombres en el “Paso del Aquidaban” mas conocido como “Paso Tuyá”. Croquis:

Paso 3

Combate Cnel. Moreno. Los 100 hombres y 4 cañones del “Paso del Aquidaban” o “Paso Tuyá” estaban al mando del cnel. Moreno que sólo pudo efectuar dos disparos de artillería antes de ser superado violentamente por los brasileños. Croquis:

Paso 4

Combate principal. Centurión. Una vez que los aliados cruzan el “Paso Tuyá” y superan el monte que antecede al campo abierto de Cerro Corá se despliegan en guerrilla para enfrentar a su vez a la guerrilla paraguaya que ya había sido desplegada por orden del Cnel. Juan Crisóstomo Centurión, comandante de la Mayoría (Estado Mayor, a unos 700 metros del Paso. A este combate principal asisten el Mcal. López acompañado por su hijo Panchito y el Coronel Silvestre Aveiro, ubicándose los tres detrás de la línea paraguaya sin tomar parte del combate. Es cuando el Cnel. Centurión es herido en la mandíbula por una bala y cae con caballo y todo al suelo. López –a cierta distancia- pregunta quién es el oficial caído respondiéndole su hijo: “Es el coronel Centurión, papá”. La caballería brasileña, siguiendo instrucciones de Cámara empieza a rodear los flancos de la guerrilla paraguaya para adelantarse y tomar el único camino que atraviesa el valle para impedir que se evadieran los efectivos paraguayos hacia la Picada del Chiriguelo. López abandona el lugar acompañado siempre por Panchito y Aveiro, y replegándose se dirige al galope a su tienda del Cuartel General, al sureste del combate. Croquis:

Aveiro relata que ese repliegue los dirige sobre el camino hacia la carpa de López y en ese lugar su hijo Panchito se desvía y se dirige al carro de su madre, Alicia Lynch, que estaba a un costado del camino y distante a 100 metros de la tienda de López) y que –al parecer- ya estaba abandonando el sitio mientras López y Aveiro siguen su camino al sureste. Ni Aveiro, ni Centurión hablan de ningún eventual encuentro de Solano López con su compañera Elisa A. Lynch en este momento.

Paso 5

Breve dialogo con su madre. Pasando unos pocos metros al sur-este del Cuartel General y tienda de López, éste se encuentra con su madre y hermanas (Aveiro manifiesta que la había mandado llamar a la madre con anticipación a la batalla). Se produce el conocido diálogo donde la madre le pide socorro a López y éste contesta: “Fíese de su sexo, sañora!” (Aveiro). Este diálogo, tal como se exhibe, no habría durado más de 10 segundos. Producido este breve diálogo Aveiro escribe: “Y pasamos…”. López y un reducido grupo se evade en dirección al Niguí.

Paso 6

Itinerario de López. Conforme al plano de Aveiro, este sería el momento en que el repliegue de López cambia de dirección y abandonando la dirección sur-este que lo conducía a la Picada del Chiriguelo y quizás movido por aquella encerrona de la caballería brasileña ahora se dirige al nor-este, hacia el Aquidaban Nigui. Centurión certifica que cuando salía del combate mal herido en la boca observó a la distancia que el Mariscal ya era perseguido por un piquete de caballería brasileña y se dirigía hacia la orilla del Aquidaban Nigui donde acostumbraba pescar (a unos 400 metros de su tienda). Croquis:

Paso 7

Muerte de Panchito López. Al mismo tiempo que Solano López se dirigía al Aquidaban Nigui, el cnel. Brasileño Francisco Martins llega hasta el carro de Elisa Alicia Lynch y bate a la guardia de seguridad que allí estaba, quedando frente a frente con el coronel Francisco “Panchito” López, hijo del Mariscal López, a quien intima rendición y éste contesta: “un coronel paraguayo no se rinde”. Aún cuando la madre le ruega al hijo abandonar su resistencia. “Panchito” López reacciona con violencia ante la presencia del jefe brasileño pero es muerto con un disparo de revolver del propio Martins. Croquis:

Paso 8

Muerte del V.P. Francisco Sanchez. A pocos metros de la carreta de Alicia Lynch donde Panchito López es muerto, el anciano vice-presidente Francisco Sanchez es intimado a rendirse por parte de un joven oficial del escuadrón de caballería del Cnel. “Joca” Tavares, el Cap. Asambuja, quien encontrando resistencia por parte del paraguayo no duda en matarlo en el acto de un lanzazo (Centurión). Croquis:

Paso 9

Lanzazo de Francisco “Chico Diabo” Lacerda y sablazo. Luego de un largo repliegue al galope, ahora al Este y bordeando el arroyo Aquidaban Nigui, López es seguido de un grupo de sus oficiales entre los que estaban los capitanes Arguello, Ybarra, Cabrera y Chamorro y el coronel Silvestre Aveiro y es alcanzado por el pequeño grupo de seis jinetes brasileños que interrumpen el paso al grupo paraguayo en una ensenada del Nigui (Centurión). Dos jinetes brasileños intentan detener a López tomándolo del brazo y éste reacciona blandiendo su espadín y ordenando a gritos a sus oficiales: “maten a estos macacos!” interín recibe un sablazo en la frente por parte del Cap. Juan Pedro Nuñes que le produce un profundo corte del que rápidamente manó sangre en cantidad. Nuñez también recibe una herida que le propina Solano López (Centurión). Chamorro y Arguello acuden a la orden de López y se produce un entrevero con los jinetes brasileños donde estos oficiales paraguayos reciben heridas mortales así como López recibe un lanzazo en el abdomen por parte del cabo brasileño Francisco “Chico Diabo” Lacerda. López, mal herido, es rescatado por Aveiro y se dirigen al Aquidaban Nigui al galope y al llegar al montecillo previo al arroyo –y producto del desnivel del suelo- caen de sus monturas (Aveiro). En la infografía se señala un lugar hipotético del lanzazo a López ya que Aveiro no lo establece claramente, sólo habla de una ensenada del Nigui. Croquis:

Paso 10 y final.

Muerte de Solano López. Aveiro ayuda a López a incorporarse con bastante dificultad pero aun así logran llegar a la orilla izquierda del Aquidaban-Nigui donde se acerca el Cap. Cabrera a ofrecerse para buscar ayuda pero en el acto desaparece. Aveiro e Ybarra intentan hacer subir a López por la barranca de la orilla derecha y ante la imposibilidad de hacerlo López ordena buscar un mejor lugar para el efecto. Es el momento cuando llegan los soldados brasileños haciendo disparos repetidos con sus carabinas Spencer. Aveiro e Ybarra logran subir la barranca y se refugian en lo alto del terreno entre unos arbustos mientras un debilitado Solano López por la abundante pérdida de sangre de sus heridas es alcanzado por soldados brasileños que intentan desarmarlo al mismo tiempo que el Gral. Cámara le intima rendición recibiendo por respuesta la conocida frase: “muero por mi patria!” (Cámara). Un soldado brasileño, detrás de Cámara, descarga un tiro de su fusil en la espalda de López produciéndole la muerte instantánea. El cuerpo de López es conducido a su tienda para procederse a su autopsia, entrega a sus familiares y entierro en una fosa común con su hijo Panchito (Centurión).  Croquis:

Visto los detalles del plano de Aveiro y el croquis realizado sobre el mismo, sacamos varias conclusiones de este relato por pasos combinado del suyo y de Centurión:

Si bien López acude desde su carpa hasta el lugar del combate principal, unos 300 metros, se ubica detrás de la línea paraguaya y percatándose del evidente desenlace contrario a las armas paraguayas por la desigual proporción de combatientes decide voltearse y abandonar el lugar y a sus soldados.

No hay referencias históricas ni testimonios que indiquen que en su repliegue al Cuartel General López haya intentado dirigirse al carromato de su compañera, Alicia Lynch, donde se hallaban sus otros hijos menores y, por el contrario, es su hijo mayor, Panchito, quien lo hace a efectos de estar junto a su madre y defenderla. No se registra en el relator exclusivo de esta parte –Aveiro- que Solano López haya ordenado a su hijo que proteja a su madre pues ya había dado esa orden al Gral. Francisco I. Resquín (que terminó rindiéndose). En este repliegue, Solano López vuelve a pasar por el costado del carro de Alicia Lynch –a unos 150 metros- cuando se dirige al Aquidaba-Nigui.

López mantiene la misma primera dirección de repliegue hacia el sur-este cuando encuentra a su madre y hermanas  y sólo después de este encuentro cambia el rumbo  conforme al mismo plano de Aveiro. Este cambio de rumbo supone el abandono definitivo del Campamento del Ejército Paraguayo que es cuando se inicia la persecución de los jinetes brasileños hacia el Nigui y que supondrá alejarse del combate principal unos 2.200 metros en línea recta. Croquis:

El repliegue de López supone un largo recorrido ya que en la primera dirección tomada (al sureste) se observa el recorrido de aproximadamente unos 700 metros desde el combate principal hasta ver a su madre y cambiado el rumbo se dan unos 2.000 metros más de recorrido, totalizando 2.700 metros sobre el itinerario estudiado. Según el plano de Aveiro, la distancia entre la tienda de López en su Cuartel General y la orilla del Aquidaban Nigui donde es inmolado es de 1.500 metros en línea recta, a través de los totorales, pero la medición con la herramienta Google nos da 2.200 metros aproximadamente en línea recta por lo que el itinerario zigzagueante de López es mayor a esta última distancia.

Por la rapidez de la entrada de los brasileños al campamento paraguayo a partir de las 11 horas de la mañana y el largo repliegue de Solano López se desprende que “Panchito” Lopez y el vicepresidente Sánchez mueren mucho antes que el Mariscal que aún se hallaba tratando de desprenderse de sus perseguidores cuando su hijo mayor y su vicepresidente ya fueron muertos en combate

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¿Huyó López del combate y abandonó a su familia frente a los aliados?. Ahora tiene usted los elementos de juicio para decidir su opinión.

El escuadrón de Caballería que persiguió al Mariscal López

En la foto también aparecen Antonio Cándido de Azambuja quien mata al Vicepresidente Francisco Sánchez, y el coronel Francisco A. Martins, quien mató a “Panchito” López”.

El comandante del cuerpo de Caballería que ingresó a Cerro Corá a la vanguardia de la columna fue el coronel Joao “Joca” Silva Tavares.