CAXIAS ENCUENTRA LOS CADÁVERES DE LOS EJECUTADOS EN SAN FERNANDO.
El origen del error de la identificación del VP Francisco Sánchez como fusilado por López
En su libro “Washburn y la Conspiración Paraguaya”, 2023 la mediática historiadora Noelia Quintana Villasboa tradujo el panfleto que en idioma francés y con el mismo título fue publicado anónimamente en Europa en diciembre de 1868 y que la citada autora atribuyó su autoría al cónsul francés en Paraguay Paul Cuverville. En la obra, la Licenciada Quintana apoyó vivamente la versión que en ese panfleto se deslizaba, es eso de que nunca hubo paraguayos y extranjeros torturados y ejecutados en San Fernando.
Hoy traemos una versión de la historiografía brasileña de autoría del Padre Joaquin Pinto de Campo, es una obra que hace las veces de una biografía del Marqués de Caxías, mariscal del Ejército Brasileño y comandante en jefe de los aliados desde 1867 durante la Guerra de la Triple Alianza y en su capítulo XX, sub título III, pág. 312 se lee-en traducción aproximada al español- respecto de la llegada de Caxías a la orilla derecha del Tebicuary donde se hallaba el campamento de San Fernando después de haber sido advertido de lo que allí se descubrió:
“En efecto, poco después, el 4 de septiembre, queriendo el Sr. Marqués de Caxías verificar este punto, fue en persona con su Estado Mayor y baqueanos paraguayos a un sitio poco arriba del paso del Tebicuary. En el camino le fueron atrayendo la atención diferente trillos formados sobre el césped del campo en los cuales de espacio en espacio se notaban manchas de sangre negra y pedazos de vestimentas. Declararon los prisioneros que estaban acampados que por ahí fueron arrastrados los cadáveres de los torturados.
Siguiendo siempre la dirección de esos trillos fue Su Excelencia hasta un rincón formado por el monte al Este y por las aguas del Tebicuary al norte donde observó tres filas de terrenos limpios de maleza indicando haber sido tierra recientemente removida. Luego, desaparecieron todas las dudas sobre su servicio porque se comenzaron a ver brazos, piernas, cabezas o troncos de cadáveres mal enterrados, pudiéndose hasta percibir distintamente, en algunos de los fusilados, orificios producidos por las balas.
Una braza distante de estas zanjas, y como para asignar la jerarquía de otras víctimas se divisó cuatro poco profundas donde estaban atravesados quince cadáveres, completamente desnudos, en estado avanzado de putrefacción patentando así cada uno el género de la tortura. Entre éstos, indicaron los baqueanos el del viejo vicepresidente de la República D. Sánchez, y el del General Bruguez, que aún tenía los ojos vendados con una faja blanca, y sobre el pecho los signos de cinco balas, señalaron también pero con incierta precisión los cadáveres de (de las) Carreras, de su secretaria Rodriguez (Larreta) y de otros oficiales paraguayos, notándose que unos habían sido muertos por golpes profundos en la garganta, otros decapitados, descansando sus cabezas al lado de los cuerpos.
Junto a estas zanjas, toscamente hechas, existía una cruz de madera con una inscripción – 353 – en uno de sus brazos, conmemorativa de la cantidad de víctimas” (Sic)
VIDA DO GRANDE CIDADÃO BRASILEIRO LUIZ ALVES DE LIMA E SILVA – BARÃO,CONDE, MARQUÊS E DUQUE DE CAXIAS. Rio de Janeiro – Imprenta Nacional, 1939.
Además de exhibir otra fuente que confirma las torturas y ejecuciones en San Fernando, aquí nos encontramos con la prueba de que el error en la identificación del supuesto cadáver del Vicepresidente Francisco Sánchez se debe a una falsa información dada por los propios baqueanos paraguayos y porque, fundamentalmente, en aquellas “Tablas de sangre” aparece el nombre Francisco Sánchez en cinco oportunidades siendo éste un caso de homonimia y no se trata de un invento de los aliados en ocasión de la publicación de los tan rechazados “Papeles del Tirano” o “Tablas de Sangre” o “los cuadernos de Resquin” de los que se tomó el ministro americano Martín Mc Mahon para rechazar la autenticidad de esos papeles capturados por los aliados en el Cuartel general abandonado por Solano López al final de las batalla de Ita Ybaté.
Hemos recurrido a esas “Tablas de Sangre” y revisada la lista de ejecutados que el Gral. Resquin incluye en el día 26 de agosto de 1868, día en que López y el ejército paraguayo abandonan San Fernando y efectivamente junto al Gral. Bruguez son fusilados 45 personas y entre ellas figuran el coronel Núñez, el mayor Mora, el alférez Bobadilla, el capitán Rosas, el congresista de 1865 Carlos Riveros y muchos otros. Rodríguez Larreta fue fusilado cuatro días antes. Otro error de los baqueanos fue nombrar inciertamente al uruguayo de las Carreras como enterrado en San Fernando pues éste fue fusilado recién en Itá Ybate en diciembre de ese año.
No hay mucho más que concluir salvo confirmar, una vez más, que la argumentación lopista para negar, maquillar y/o esconder las atrocidades y crímenes de Francisco Solano López contra su pueblo se van acumulando desde que la aparición del Internet nos ha permitido llegar al texto de libros tan antiguos como el del Padre Joaquin Pinto de Campos, Prelado doméstico de su Santidad y diputado a la Asamblea General Legislativa del Brasil por las Provincia de Pernanbuco, publicado en 1878 en Lisboa Portugal.